La base original del Gato británico de pelo corto fue extraída de los robustos gatos comunes de Gran Bretaña, cuando los concursos y la cría se hicieron populares a finales del siglo xix. Fue la raza más popular de los primeros concursos de gatos británicos.
Contenido
Valoraciones del "Gato británico de pelo corto"
Es importante la convivencia que vas a tener con tu nuevo amigo. Antes de plantearte la adquisición de un gato de la raza "Gato británico de pelo corto" debes conocer ciertos factores. Debes tener en cuenta su carácter, su necesidad de ejercicio, su interacción con otras mascotas, sus cuidados y si tienes niños pequeños, su nivel de tolerancia hacia ellos.
Alegría
3,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Nivel de actividad
2,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Amabilidad con otras mascotas
4,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Amabilidad con los niños
4,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Requisitos de aseo
2,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Vocalidad
2,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Necesidad de atención
1,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Afecto hacia sus dueños
3,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Docilidad
4,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Inteligencia
4,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Independencia
4,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Robustez
3,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Historia
El Gato británico de pelo corto es una de las razas de gatos más antiguas del mundo. Los romanos llevaron sus gatos a las Islas Británicas, donde se extendieron y se adaptaron al duro clima. En 1871, los primeros criadores expusieron sus gatos en el Crystal Palace de Londres con el nombre de British Shorthair.
Como, desgraciadamente, el stock de cría era muy reducido después de las guerras mundiales, los criadores cruzaron al Gatos Persa con gatos domésticos no registrados. Esto no sólo aumentó la variedad de la raza, sino que también reforzó su carácter amistoso.
Debido al cruce con los Persas de pelo largo, hoy en día también hay algunos gatos de esta raza con el pelo largo. Los criadores solían regalar los gatos de pelo largo, mientras que hoy en día los venden con el nombre de «Gato británico de pelo largo» (BLH). El Gato británico de pelo corto (BKH) se presenta en más de 300 variedades de color reconocidas, siendo las más conocidas el silver tabby y el color de pelaje azul. Esta raza en particular también se conoce como Gato británico azul.
Popularidad del "Gato británico de pelo corto"
A partir de los años 70, la raza comenzó una exitosa internacionalización: fue reconocida por la Fédération Féline Internationale (FIFé) en 1977, por The International Cat Association (TICA) en 1979, y por la American Cat Fanciers Association (CFA) en 1980.
De hecho, el Gato británico de pelo corto es actualmente una de las razas de gatos más populares del mundo. No es de extrañar que incluso sea la raza preferida en Gran Bretaña, donde, con casi 7.000 gatitos registrados al año, representa casi una cuarta parte de la población felina, y más del doble que su competidor directo. Tampoco en Estados Unidos se puede negar su éxito, ya que las cifras de la CFA muestran que está en el podio de los gatos más populares de Estados Unidos. También es una de las razas felinas más populares en Francia, y su población no deja de crecer en el país: según las estadísticas del Livre Officiel des Origines Félines (LOOF), los registros de gatitos se duplicaron en la segunda década del siglo XXI, alcanzando ahora unos 2.500 ejemplares al año.
Características físicas
El Gato británico de pelo corto es un gato de tamaño medio a grande, de constitución sólida y muy redonda. El cuerpo es ancho y musculoso, y las patas son cortas y poderosas. La cola es ancha en la base y debe tener la punta redondeada.
La cabeza es fácilmente reconocible: es maciza y redonda, con una nariz corta, mejillas redondeadas y grandes ojos redondos que pueden ser amarillos, cobrizos, azules o verdes. Pero es sobre todo a sus bigotes y a su hocico redondeado a lo que debe su famosa y enigmática sonrisa que da la impresión de que siempre le divierte lo que ve.
Corto, denso y sin subpelo, su pelaje es más a menudo azul (y es también el color más buscado en las exposiciones felinas), pero el Gato británico de pelo corto puede tener un pelaje de diferentes colores (blanco, crema, negro, chocolate, lila, canela…) y con varios patrones (bicolor, atigrado, tortie…).
El dimorfismo sexual es moderadamente marcado, siendo la hembra más pequeña que el macho.
Tamaño y peso:
Talla macho: 32 – 36 cm
Talla hembra: 30 – 34 cm
Peso macho: 4 – 8 kilos
Peso hembra: 3 – 6 kilos
Variedades del "Gato británico de pelo corto"
Existe una versión de pelo largo del British Shorthair, que es el resultado de cruces con persas realizados a principios del siglo XX. Sin embargo, no es considerada por la mayoría de las organizaciones felinas internacionales (FIFé, TICA…) como una simple variedad, sino como una raza en sí misma: el Gato británico de pelo largo.
Aparte de la longitud del pelaje, no hay ninguna diferencia entre el British Shorthair y el British Longhair.
Carácter y aptitudes
"Gato británico de pelo corto"
El Gato británico de pelo corto es un gato tranquilo y poderoso que forma fuertes vínculos con toda su familia, sin favorecer a ninguna persona. Pacientes y tolerantes, son ideales para los niños que han aprendido a comportarse con un gato. Por otro lado, no le gustan las emociones y prefiere mantenerse alejado de los juegos demasiado activos o de los niños revoltosos. Por lo tanto, no es el compañero ideal para una familia con niños pequeños; es mejor si ya tienen cierta edad.
Son más bien reservados con los extraños, pero se vuelven rápidamente cariñosos una vez que se conocen y dan la bienvenida a los amigos cercanos que los visitan a menudo. Dicho esto, su afecto no es abrumador: no es de los que exigen una atención constante, ni de su familia ni de las visitas. Después de unas cuantas palmaditas, encuentran un lugar cómodo en las inmediaciones y son capaces de mantenerse solos.
Extremadamente sociable con otros animales, se lleva muy bien con sus compañeros y con perros acostumbrados a los gatos. Su pasado como gato guardián quedó atrás, ya que ahora cohabita fácilmente con roedores, aves y reptiles.
Aunque es muy cariñoso, no le suele gustar sentarse en el regazo de su amo, sino que prefiere acurrucarse a su lado. Asimismo, una vez adulto, no aprecia que se le coja en brazos y prefiere permanecer en el suelo con las cuatro patas.
Independiente y sin problemas para pasar tiempo consigo mismo, le va relativamente bien que le dejen solo durante un periodo de tiempo razonable. No sufre de ansiedad por separación cuando su familia está en el trabajo, y se puede dejar solo en casa durante un fin de semana largo sin preocupación, siempre que se satisfagan sus necesidades de comida y agua. En general, se adapta fácilmente a diferentes situaciones.
Por último, no es un gato muy ruidoso, pero cuando habla, su voz suave contrasta con su físico de oso de peluche. Su ronroneo, en cambio, es potente y fuerte, similar al sonido de un pequeño motor.
Cuidado y aseo del "Gato británico de pelo corto"
El Gato británico de pelo corto es una raza felina de bajo mantenimiento: un cepillado semanal es suficiente para eliminar el pelo muerto y garantizar un pelaje sano y brillante. Durante la época de muda, en primavera y otoño, el cepillado debe ser más frecuente.
Las sesiones de cepillado son la oportunidad perfecta para revisar los dientes, los ojos y los oídos en busca de signos de infección.
También deberían dar la oportunidad de mirar sus uñas, que pueden recortarse con un cortaúñas si están demasiado largas. Obviamente, esto es más frecuente si no tiene un poste de rascado disponible.
¿Gato de exterior o de interior?
El Gato británico de pelo corto es una raza de gatos de interior, y puede prescindir del acceso al exterior. Sin embargo, si se les permite salir al exterior, sus dueños deben asegurarse de que no se pongan en peligro. De hecho, tranquilo y confiado, es probable que no reconozca las situaciones potencialmente peligrosas, no huyendo al ver a un perro agresivo o permaneciendo tranquilamente en medio de la carretera a pesar de que se acerque un coche.
¿Cuánta actividad necesita el "Gato británico de pelo corto"?
Poco activos, aunque tengan sus momentos de locura, el Gato británico de pelo corto necesita ser estimulado de vez en cuando para evitar que se vuelva perezoso. Correr detrás de una pelota, perseguir la punta de un láser o atrapar un juguete son actividades que contribuyen a reforzar el vínculo con su dueño al tiempo que le ayudan a mantenerse sano.
Además, a pesar de su naturaleza tranquila y relajada, el Gato británico de pelo corto es extremadamente inteligente, capaz de aprender muchos trucos. También les encantan los distintos rompecabezas para gatos, sobre todo cuando entregan una recompensa para disfrutar.
Salud y alimentación
El Gato británico de pelo corto es, en general, una raza de gato robusta, pero puede estar sujeta a ciertas afecciones:
La enfermedad renal policinética, un trastorno genético que provoca numerosos quistes en los riñones: gracias al trabajo de los criadores y a la existencia de una prueba de ADN, esta enfermedad es ahora relativamente rara;
Cardiomiopatía hipertrófica, un agrandamiento del tejido cardíaco que provoca alteraciones en su funcionamiento: aunque el programa de cría responsable que se ha llevado a cabo ha reducido mucho el riesgo, esta enfermedad sigue siendo un problema;
Hemofilia tipo B, un problema de coagulación que provoca peligrosas hemorragias: esta enfermedad puede detectarse mediante pruebas de ADN, y un criador de British Shorthair concienzudo se encarga de identificar tanto a los gatos portadores como a los afectados para descartarlos;
La gingivitis, una afección relativamente benigna pero que en algunos casos puede requerir la intervención del veterinario.
También hay que tener en cuenta que el mayor riesgo para la salud del Gato británico de pelo corto es, con mucho, la obesidad. Codicioso y bastante perezoso, a menudo mimado por su familia, corre un gran riesgo de ver cómo su cuerpo musculoso se convierte gradualmente en grasa, lo que puede ser la causa de muchas enfermedades. El propietario tiene la responsabilidad real de permitirle tener un nivel de actividad suficiente y así evitar que gane peso, por ejemplo, tomando la iniciativa de jugar con su gato.
Esperanza de vida
De 12 a 15 años
Alimentación
El Gato británico de pelo corto es un glotón que disfruta tanto de la comida industrial para gatos como de la que consume su familia. Para que se mantengan sanos, su dieta debe adaptarse a su edad y nivel de actividad.
La obesidad en los gatos es un riesgo real en esta raza, pero no es inevitable: un gato que juega a diario y al que no se le dan más raciones de las recomendadas por el fabricante no debería ganar más peso del necesario. En cambio, un gato perezoso, al que se le da toda la comida que quiere y se le mima regularmente con golosinas, es probable que engorde y ponga en peligro su salud.
Por lo tanto, es mejor no confiar demasiado en la capacidad de autorregulación del gato. Para evitar que coma más de lo debido, su dueño no debe dejar comida en su cuenco, y debe asegurarse de que su compañero no tenga acceso a la comida que deja su familia.
Si, a pesar de estas precauciones, el Gato británico de pelo corto comienza a comer en exceso, es aconsejable consultar a un veterinario para establecer un programa de alimentación adecuado.
Comprar un "Gato británico de pelo corto"
El precio medio de un Gato británico de pelo corto es de 1.000 euros, pero la horquilla de precios es muy amplia, desde 500 hasta más de 2.500 euros.
Estas diferencias se explican por las características físicas del gato (especialmente su color) y su mayor o menor conformidad con el estándar de la raza, así como por su ascendencia más o menos prestigiosa. Por otro lado, no hay una diferencia de precio significativa entre un gato macho y uno hembra.
El Gato británico de pelo corto (BKH) se presenta en más de 300 variedades de color reconocidas, siendo las más conocidas el silver tabby y el de pelaje azul, el Gato británico azul.
Como ya hemos dicho, la variante de color más conocida del Gato británico de pelo corto es el Gato británico azul, con un pelaje sólido de color gris azulado, ojos anaranjados y una cola de tamaño medio.
Los gatos con pelaje azul tienen hermosas tonalidades en su pelaje que los harán especialmente codiciados por los posibles adoptantes. Poder admirar un manto gris claro con reflejos de color en el macho o, por el contrario, un gris que realmente se adentra en las notas azules es bastante raro de admirar.
Sin embargo, no todos los gatos con un color gris concreto se clasifican como Gato británico azul. Para ello, el color de los ojos debe ser de oro a cobre. Si no es así, el gato de esta raza será considerado simplemente como un gato gris.
La combinación de un pelaje azul con la intensidad de esa mirada hace que Gato británico azul sea absolutamente hermoso. Los dos colores contrastan perfectamente, por lo que este gato tiene tanto éxito.
Reconocido por la CFA, cTICA, ACF, ACFA/CAA, CCA-AFC
Origen: Estados Unidos
Antiguedad: Década de 1960
Carácter: Activo y curioso
Peso: 2,5-5 kg
Aunque el Bombay parece una pantera pequeña, no tiene el carácter de una: no es ni salvaje ni agresivo.
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Historia
El Gato Bombay fue creado en 1958 por Nikki Homer, una criadora de Gato americano de pelo corto con sede en Kentucky, Estados Unidos. Soñando con tener un gato similar a una pantera negra, pero en miniatura y tan manso como un cordero, ese año decidió cruzar ejemplares de su programa de cría con el Gato Birmano americano. Su morfología parecía perfectamente adaptada a su proyecto, ya que al igual que la pantera, esta raza tiene una musculatura muy aparente.
Se llevó a cabo un primer apareamiento entre una hembra de Gato Birmano americano de color arena y un Gato americano de pelo corto de color negro, al que siguieron otros matrimonios entre representantes de las dos razas. Sin embargo, los resultados no fueron realmente satisfactorios. Los gatos resultantes se parecían más al Gato americano de pelo corto negro que a las pequeñas panteras. Nikki Homer decidió castrarlos y venderlos como mascotas.
Sin embargo, no se rindió y volvió a intentar una cría similar en 1965. Tras dos años de cría selectiva, obtuvo el gato negro que había imaginado: un aspecto majestuoso, ojos cobrizos y un pelaje negro ébano muy brillante. Le puso el nombre de Bombay, en honor a la ciudad india del mismo nombre (ahora Mumbai), donde se pueden ver panteras negras en el Parque Nacional Sanjay Gandhi, que forma parte de la ciudad.
Entre 1967 y 1972, consiguió producir nada menos que 27 camadas y permitió el nacimiento de unos 100 gatitos. Sin embargo, sólo se quedó con los gatitos del programa de cría del Bombay que cumplían los criterios que ella misma había establecido; los demás se regalaban como mascotas.
Encantada con el resultado, se dedicó a conseguir el reconocimiento de la raza que había creado. Le costó algunos años más conseguir su objetivo, pero sus esfuerzos se vieron finalmente coronados por el éxito: en 1976, la Asociación Americana de Aficionados a los Gatos (CFA) se convirtió en la primera organización felina en dar el paso de reconocer al Bombay.
Después de dedicar tanta energía al gato durante casi 20 años, Nikki Homer quería seguir adelante. Decidió dejar de criar el Bombay.
Sin embargo, otros criadores estadounidenses que se enamoraron de la pequeña pantera negra tomaron la antorcha. Entre ellos, Suzanne y Herb Zwecker desempeñaron un papel especialmente importante, invirtiendo mucho tiempo y esfuerzo en el desarrollo y reconocimiento de la raza. Decidieron crear nuevas líneas adicionales desde cero, en lugar de limitarse a utilizar los ejemplares existentes.
Sin embargo, a pesar de los esfuerzos de todos los implicados, la raza tuvo dificultades para abrirse paso. Las supersticiones sobre los gatos negros y la reticencia de los criadores del Gato Birmano americano, que veían al recién llegado como un competidor. Sin embargo, el interés por el gato negro cobró mayor importancia cuando en 1985 Luv It Black, uno de los ejemplares presentados por Suzanne y Herb Zwecker, fue homenajeado por la CFA en los actos organizados por la organización.
Sin embargo, el desarrollo del Gato Bombay también se vio obstaculizado por cuestiones genéticas. Debido a que los criadores son el Gato americano de pelo corto, el Gato Birmano americano o el mismo Gato Bombay, y en una misma camada pueden coexistir el Bombay y gatitos con colores de pelaje y ojos diferentes, más acordes con los del Gato americano de pelo corto. Estos son sistemáticamente retirados del programa de cría y vendidos como mascotas.
En Francia, la llegada de la raza se remonta a 1989. Fue en ese año cuando se introdujo en el país la primera pareja de ejemplares, Opio y Bagheera. Se creó un programa de cría y se importaron 10 ejemplares más en los cinco años siguientes.
El reconocimiento del "Gato Bombay"
Aunque el Bombay sigue siendo bastante raro, está reconocido por muchas organizaciones, empezando por las más importantes a escala internacional.
Al haber sido creada en Estados Unidos, no es de extrañar que la raza fuera reconocida por primera vez por la Cat Fanciers’ Association (CFA), la principal institución felina del país. Esto se hizo en 1976, y la vecina Asociación Canadiense del Gato (CCA) siguió su ejemplo en 1988. Muchas otras organizaciones nacionales siguieron su ejemplo, como la francesa Livre Officiel des Origines Félines (LOOF), la Australian Cat Association (ACF) o la New Zealand Cat Fancy (NZCF).
La Asociación Internacional de Gatos (TICA) le otorgó el reconocimiento en 1979, haciéndolo parte de un grupo que también incluye al Gato Birmano americano. La Federación Mundial de Gatos también lo acepta.
En cambio, la Fédération Internationale Féline (FIFé), que agrupa a organizaciones de unos cuarenta países -entre ellas Felis Belgica, de Bélgica, y la Fédération Féline Helvétique (FFH), de Suiza-, no reconoce el Bombay.
También existe una versión inglesa de la raza, que se desarrolló en Gran Bretaña en la década de 1980 y que difiere sustancialmente del Bombay americano. Está reconocida desde 1994 por el Governing Council of the Cat Fancy (GCCF), la principal organización felina del país. El GCCF la considera una variedad de la raza asiática, junto con el Gato asiático humo atigrado, Gato asiático atigrado, Burmilla y Tiffanie. Sin embargo, no reconoce el Bombay, que puede encontrarse en todo el mundo.
Características físicas
Al cruzar el Gato americano de pelo corto negro y el Gato Birmano americano, la creadora del Bombay, Nikki Homer, quería crear un gato que se pareciera a una «pantera negra en miniatura». Es justo decir que la apuesta dio sus frutos. Y, como es lógico, la raza resultante ha heredado la mayoría de los rasgos físicos de sus antepasados.
El elegante Bombay es una raza rechoncha con un cuerpo de tamaño medio y un peso mayor de lo que se podría pensar a primera vista. Hay que decir que tiene una estructura ósea bastante fuerte, sobre la que descansa además una importante y muy aparente musculatura. El pecho es redondo y amplio, la espalda recta desde los hombros hasta la grupa. La cola es recta y de longitud media, estrechándose hasta la punta.
Las patas son proporcionadas al cuerpo, bien musculadas, y se prolongan en pies redondos con almohadillas negras.
La cabeza es de tamaño medio y redonda. En la parte superior de la cabeza se encuentran las orejas bien extendidas y moderadamente grandes. Son anchas en la base, redondeadas en la punta, y se inclinan ligeramente hacia delante dando al perro un aspecto de alerta.
Se dice que el Gato Bombay tiene los ojos tan redondos como las monedas de cobre brillantes. De hecho, son grandes, redondos y se sitúan en la prolongación de la base de las orejas. Su color brillante va del cobre al oro, siendo el primero el más apreciado. Son aún más bonitos porque contrastan con el pelaje totalmente negro, y esta combinación es una característica distintiva de la raza.
El perfil también muestra un ligero stop, y la nariz tiene una punta ligeramente redondeada. La nariz es negra y está coronada por un hocico corto, ancho y redondeado. El mentón está bien desarrollado, pero no es ni prominente ni hundido.
El Bombay prácticamente no tiene subpelo. El pelaje superior es corto, denso pero fino, sedoso y satinado, que es otra característica de la raza. Esta es otra característica de la raza. El pelaje de este gato debe ser brillante como el charol.
También es de color negro azabache desde la raíz hasta la punta, y este gato es la única raza que es consistentemente negra. Sin embargo, no es hasta los dos años cuando adquieren su color definitivo: nacen con un pelaje ligeramente más claro, que se va oscureciendo a medida que crecen, hasta convertirse en un negro intenso.
También existe un ligero dimorfismo sexual en esta raza. Los machos y las hembras tienen un tamaño muy parecido, pero su peso difiere más. El macho puede pesar hasta 5 kg, mientras que la hembra no debe superar los 4 kg.
Por último, cabe mencionar la versión inglesa del Bombay, que presenta algunas características físicas específicas. En efecto, mientras que su primo americano es del tipo cobby, éste es del tipo de línea media (un tipo de cuerpo un poco menos delgado). Por lo tanto, tiene patas más delgadas, que terminan en pies ovalados. Su cabeza es triangular y ligeramente hueca. También se distingue por sus ojos almendrados, cuyo color varía del amarillo dorado al verde. Sin embargo, aparte de estas pocas características, el Bombay americano y el Bombay inglés son físicamente bastante similares.
Tamaño y peso
Tamaño macho: 20 – 25 cm
Tamaño hembra 20 – 25 cm
Peso macho: 3 – 5 kg
Peso hembra: 3 – 4 kg
Carácter y aptitudes
Aunque el Bombay parece una pantera pequeña, no tiene el carácter de una: no es ni salvaje ni agresivo. Por el contrario, es muy sociable y cariñoso, y es una opción ideal para quien busca un gato para vivir en el seno de la familia, tanto que busca la compañía de los humanos. Está especialmente apegado a la persona que más le cuida, sin ser un gato unipersonal: su cercanía a una persona en particular no le impide dar cariño a todos los miembros de la familia.
También le gusta que le acaricien, y eso es bueno: acariciarle es realmente muy agradable, ya que su pelo tiene la textura de la seda. Y como le gustan especialmente los lugares cálidos, no es raro que se meta debajo de las sábanas en la cama, o que se acurruque en el sofá con alguno de los miembros de su familia.
Al Bombay le gustan las atenciones y los mimos. Si se siente desatendida, llamará a los miembros de su familia con vocalizaciones suaves que no rompen la tierra. En otras palabras, este gato puede ser hablador para reclamar atención, pero sus maullidos tienen el buen gusto de no ser estridentes.
Les gusta jugar con los niños y son pacientes con ellos, siempre que se les trate con respeto. Con un niño pequeño, existe un riesgo real de que esta condición no se cumpla, por lo que es mejor no dejarle nunca solo con un niño pequeño, sin la supervisión de un adulto. La seguridad de ambas partes está en juego, y esto es válido para cualquier raza de gato.
El Bombay es un gato muy cariñoso que necesita la atención y el amor de quienes lo rodean. Le encanta interactuar con su entorno y sigue a su dueño a todas partes: en el salón, el dormitorio, la cocina…
Esto, unido a su inteligencia y a su temperamento muy activo, explica que sea un excelente alumno para quien quiera enseñar a su gato trucos como, por ejemplo, a buscar un objeto.
Sin embargo, también necesita tiempo a solas y se le puede dejar solo durante unas horas en casa, esto no significa que no debas proporcionarle juegos a tu gato cuando esté fuera, para que se mantenga ocupado y no sufra de ansiedad cuando sus dueños se ausenten demasiado tiempo. Invertir en juegos interactivos, como los rompecabezas, es una excelente manera de estimular su alta capacidad intelectual, tanto si juega con ellos solo como con su familia.
Hacer que comparta su hogar con un pequeño compañero es también una forma juiciosa de hacer más llevaderas las ausencias de sus dueños. De hecho, el Gato Bombay cohabita fácilmente con sus compañeros o incluso con un perro, siempre que se sienta querido y reciba la atención que necesita. Esta convivencia es tanto mejor si se establece desde la edad más temprana de los dos protagonistas. Si no es así, al menos es mejor asegurarse de que se conozcan poco a poco, para que se acostumbren los unos a los otros y cada uno encuentre su lugar.
En cambio, es menos apropiado hacerlo convivir con un pájaro o un pequeño roedor, ya que el Bombay tiene un instinto depredador muy desarrollado: es un excelente cazador. Si debe pasar algún tiempo con ese animal, es mejor colocarlo en una jaula inaccesible para el gato, o incluso mejor, en una habitación reservada para él. Así se evitarán sorpresas desagradables.
En cuanto a los humanos desconocidos, el Gato Bombay parece estar a menudo dividido entre su desconfianza espontánea hacia ellos (de ahí que no sea de los que se acercan a ellos de inmediato) y su curiosidad intrínseca. En cuanto se siente a gusto, este último se encarga de animarle a acercarse a ellos para oler los nuevos olores y a pedir algunas caricias de vez en cuando. En cualquier caso, es esencial que tenga un árbol para gatos a su disposición: es un lugar donde se siente seguro y puede refugiarse en cualquier momento, ya sea para observar su entorno desde su percha o simplemente para descansar en paz.
Como cualquier gato, el Bombay necesita periodos de descanso, pero le sobra energía. Vivir en una casa con un jardín al que pueda acceder en cualquier momento a través de una gatera es ideal para él: así puede deambular y subirse a los árboles todo lo que quiera, lo que le ayuda a sentirse tan bien de la cabeza como de las patas.
No es de extrañar, pues, que su faceta de hurón y/o su instinto de caza le lleven a explorar otros territorios o a seguir a una presa fuera de sus dominios: eso no le impide estar contento de volver a su acogedor nido, donde le esperan las caricias y la buena comida.
Mientras esté rodeado de sus dueños, este gato puede ser relativamente flexible en cuanto al entorno de vida: siempre que éste sea lo suficientemente espacioso para que pueda jugar, correr y gastar su energía, puede adaptarse muy bien a una vida plana. Sin embargo, es importante tener en cuenta que generalmente aceptan que se les pasee con correa, siempre y cuando se les acostumbre desde pequeños: para las personas que viven en un hogar de este tipo, ésta puede ser una buena opción para que su pequeño felino descubra nuevos horizontes y pueda deambular por el exterior.
Tanto si tiene acceso al exterior como si no, el Bombay debe poder hacer sus pinitos siempre que quiera, como todos sus compañeros. Por lo tanto, es esencial que tenga un poste de rascado disponible en todo momento: esto evita que tenga que recurrir a los muebles o a las cortinas para satisfacer esta necesidad irrefrenable.
Por último, cabe mencionar que la versión inglesa del Gato Bombay tiene los mismos rasgos de carácter que sus homólogos estadounidenses, heredados en gran medida de sus antepasados birmanos.
Cuidados y Aseo del "Gato Bombay"
El Bombay tiene una capa superior densa pero corta, y su capa inferior es muy ligera. Esto explica que su pelaje no requiera mucho mantenimiento: sólo hay que cepillarlo una vez a la semana para eliminar los pelos muertos y mantener su característico aspecto brillante. Los periodos de muda, en primavera y otoño, no son muy importantes, pero es necesario cepillar dos o tres veces por semana para mantener el pelaje sano y bonito.
Es necesario revisar las orejas del Bombay una vez a la semana y lavarlas con un paño limpio y húmedo para eliminar la suciedad y limitar el riesgo de infección.
La sesión semanal de mantenimiento debe ser también una oportunidad para revisar los ojos. Es más probable que estén sucios si el Bombay es propenso a la epífora (lagrimeo excesivo). En este caso, es fundamental limpiar las comisuras de los ojos con un paño húmedo para minimizar el riesgo de infección.
El cepillado regular de los dientes del Bombay es esencial para evitar todo tipo de problemas de salud en esta zona. Esto es cierto para cualquier raza, pero el riesgo de un mantenimiento inadecuado es aún mayor para el Gato Bombay, ya que es propenso a la gingivitis. El cepillado regular con un dentífrico especial para felinos previene la acumulación de placa, que puede provocar enfermedades más o menos graves cuando se convierte en sarro. Una vez a la semana es lo mínimo, pero diariamente es lo ideal.
Debes acostumbrarte a comprobar la longitud de las garras de tu Bombay cada mes. Mientras tenga acceso al exterior, el desgaste natural suele ser suficiente. Si no es así, es necesario cortarlas manualmente: si se vuelven demasiado largas, es probable que se rompan, que le molesten o incluso que le hagan daño. Además, debe haber un poste de rascado disponible en todo momento para que pueda satisfacer su irresistible necesidad de rascar, en lugar de tener que recurrir a los muebles…
El cuidado del pelaje, las orejas, los ojos, los dientes y las garras del Bombay no requiere ninguna habilidad especial. Sin embargo, en lugar de hacerlo solo la primera vez, puede ser útil contar con la experiencia de un veterinario o un peluquero de gatos. Aprendiendo los gestos correctos de un profesional, se reduce en gran medida la probabilidad no sólo de ser ineficaz, sino también y sobre todo de actuar de forma torpe y así herir o incluso traumatizar a su mascota.
Además, es fundamental que tu mascota esté acostumbrada a estas sesiones de aseo desde sus primeros meses: cuanto antes formen parte de su rutina, más fácilmente las aceptará a lo largo de su vida. Así, él y su dueño están en la mejor posición para hacerles pasar momentos especiales juntos, y la oportunidad de acariciar y abrazar. Al ser muy cariñoso y cercano a su dueño, aprecia aún más que lo acicalen.
¿Gato de exterior o de interior?
El Gato Bombay es un excelente gato de interior. De todos modos, prefiere estar con sus humanos y no tiene un gran afán de libertad. En un piso grande y acogedor para los gatos, con un poste para rascar, una bandeja sanitaria y una zona de alimentación, nada se interpone en el camino de una feliz vida en común.
Debe evitar el acceso sin restricciones al exterior, ya que este gato de mente abierta y curiosa no tiene miedo de nada. Desgraciadamente, esto también incluye a los coches y a los receptores. Lo ideal es dejar que el gato negro corra en un jardín seguro o en un balcón.
A algunos representantes de la raza incluso se les puede enseñar a caminar con correa como un perro. Con un poco de práctica, estos gatos inteligentes y cariñosos lo harán tan bien como un perro. Sin embargo, esto depende del carácter individual, así como de las condiciones de la zona de «paseo». No debes pasear a tu gato donde haya muchos perros u otros peligros.
¿Cuánta actividad necesita el "Gato Bombay"?
Como muchos miembros de la raza son gatos de interior, necesitan una cierta cantidad de actividad. Esta mini pantera aprecia las emociones y le encanta jugar con los niños o con otros gatos. Tanto los juguetes clásicos para gatos como el aprendizaje de trucos son divertidos para estos gatos.
Con un juguete de inteligencia desafiante, los Bombay también están bien ocupados. Lo más importante es que ofrezcas a tu gato variedad. Es un gato orientado a los humanos y tampoco debería quedarse solo con demasiada frecuencia. Debería recibir mimos con regularidad.
Salud y alimentación
Tanto la línea americana como la británica gozan, en general, de buena salud.
Además, este pequeño gato puede vivir en todos los climas, excepto en los más fríos. Sin embargo, debe estar bien protegido del frío y de las corrientes de aire a bajas temperaturas, ya que su escaso subpelo hace que no esté idealmente equipado para el clima invernal.
Por otro lado, el Bombay tiene cierta tendencia al sobrepeso e incluso a la obesidad. Esto es aún más cierto si no tiene acceso al aire libre, ya que entonces tiene menos oportunidades de hacer ejercicio. No es una cuestión que deba tomarse a la ligera, ya que el sobrepeso puede provocar enfermedades o empeorar las existentes.
En cualquier caso, para adoptar un Bombay en las mejores condiciones, es imprescindible contactar con un criador digno de ese nombre. En efecto, un profesional serio se preocupa de hacer pruebas genéticas a los reproductores propuestos (en particular, para la cardiomiopatía hipertrófica y el síndrome de la hendidura facial media), con el fin de descartar a los que podrían dar a luz gatitos poco sanos. También se preocupa de ofrecer a los gatitos un entorno ideal para su equilibrio físico y mental, y se esfuerza por desarrollar su sociabilidad desde las primeras semanas. Esto es absolutamente crucial para el resto de sus vidas. En cualquier caso, en el momento de la adopción, el criador debe poder aportar un certificado de buena salud emitido por un veterinario, así como la cartilla sanitaria (o de vacunación) en la que se anotan las vacunas que ha recibido el gato.
Para mantener a tu gato sano durante toda su vida, es importante que lo lleves al veterinario para que le haga una revisión completa a intervalos regulares, aunque todo parezca estar bien. Estas revisiones dan al profesional la oportunidad de detectar lo antes posible cualquier posible problema que no sea (todavía) visible, lo que le permite tratarlo en condiciones óptimas. También es una oportunidad para llevar a cabo cualquier refuerzo de vacunas necesario. Estas visitas deben programarse al menos una vez al año, e incluso más a medida que el animal envejece.
Al mismo tiempo, el propietario también tiene la tarea de proteger a su pequeño felino contra los parásitos durante todo el año, acordándose de renovar sus tratamientos antiparasitarios cada vez que llegue el momento de hacerlo. Es importante recordar que incluso un gato que vive en un apartamento puede contraer parásitos y debe ser desparasitado.
Esperanza de vida
12 a 18 años
Alimentación
Como cualquier otro gato, el Bombay necesita una dieta adaptada a sus necesidades nutricionales, tanto en términos de calidad como de cantidad. Por tanto, debe elegirse teniendo en cuenta su edad, su estado de salud y su nivel de actividad física.
Es aconsejable vigilar las cantidades de comida que se le dan, porque a diferencia de muchos de sus compañeros, el Bombay no sabe autorregularse. Codicioso y un poco glotón, tiene una verdadera propensión a la obesidad. Por lo tanto, no es posible dejarle comida en autoservicio, a riesgo de que se atiborre. Por ese motivo, la mejor solución es ofrecer dos comidas al día, dadas a horas fijas y pesadas rigurosamente.
Es perfectamente posible darle alimentos industriales, siempre que sean de buena calidad y estén cuidadosamente elegidos para adaptarse a sus necesidades. En cambio, hay que tener mucha precaución con la comida humana, aunque no dude en pedirla, por ejemplo, durante las comidas de sus dueños. No sólo hay pocas posibilidades de que el aporte nutricional proporcionado se corresponda exactamente con sus necesidades, sino que algunos alimentos apreciados y consumidos regularmente por los humanos son tóxicos para los gatos. Esto también explica por qué es mejor evitar darle los restos de la mesa o dejar que rebusque en la basura.
Por último, el hecho de que tienda a engordar con facilidad hace que sea imprescindible controlar su peso cada mes. Si el aumento de peso se confirma o incluso aumenta durante varias pesadas consecutivas, es necesario visitar al veterinario. En efecto, sólo un profesional de la salud puede diagnosticar la causa del problema (dieta inadecuada, enfermedad, efecto secundario de un medicamento, etc.) y, por tanto, determinar cómo remediarlo.
Para terminar, como cualquier gato, el Bombay debe tener agua fresca disponible en todo momento para poder beber en cuanto sienta la necesidad.
Comprar un "Gato Bombay"
Antes de adquirir un Gato Bombay, debe asegurarse de que dispone de suficiente tiempo para el gato orientado a las personas. El primer obstáculo que hay que superar es la falta de criadores en Europa. Lo mejor es investigar en internet y contactar con un criador privado. Sin embargo, ten cuidado con las ofertas falsas y fíjate bien en el criador. Observa a los padres y hermanos del gatito, así como las condiciones de alojamiento. Por un gatito sano, vacunado y desparasitado, pagará unos 750 euros.
Valoraciones del "Gato Bombay"
Es importante la convivencia que vas a tener con tu nuevo amigo. Antes de plantearte la adquisición de un gato de la raza "Gato Bombay" debes conocer ciertos factores. Debes tener en cuenta su carácter, su necesidad de ejercicio, su interacción con otras mascotas, sus cuidados y si tienes niños pequeños, su nivel de tolerancia hacia ellos.
Lo único cierto del gato Bosque de Noruega es que es una raza antigua.
La leyenda, dice que no es otro que el gato troll de los cuentos de hadas escandinavos, pero la historia sugiere otra cosa.
Se sabe que el gato doméstico llegó a Noruega hacia el año 1000 d. de C. Además de llegar con la expansión gradual de felinos por toda Europa durante los siglos anteriores, los gatos llegaron a Escandinavia gracias al comercio entre los vikingos y el Imperio bizantino. Las pruebas de este movimiento están en algunos colores del pelaje, que son comunes en Turquía y Noruega, pero raros en el resto de Europa.
Esta relación sugiere la posibilidad de que el gen del pelo largo llegara a Noruega por las mismas rutas comerciales. El pelo largo le otorgó ventajas para los duros inviernos del norte, y se convirtió en una característica extendida en los gatos noruegos.
El skogkatt o skaukatt, como también se conoce, no se reconoció como raza en su tierra natal hasta la década de 1930, y solo algunas décadas después se llevó a cabo su cría selectiva.
Sin embargo, desde entonces el gato del bosque noruego se ha ganado su aceptación en su terra y en el extranjero, aunque sigue siendo menos conocido que el Maine Coon , otro gato de pelo largo de pasado similar.
Esta raza, también conocida como wegie, sigue reflejando sus orígenes como gato de granja, y los criadores a veces se refieren a él como su «pequeño lince».
Es grande, robusto y musculoso, y su cabeza triangular está definida por una larga nariz. Su pelo brillante tiene una capa superior impermeable y una inferior espesa y aislante. También sigue teniendo la personalidad de un gato de granja.
Estos gatos son flexibles y ágiles, cazadores excelentes, y se sabe que pescan. Aunque son compañeros dóciles y tranquilos, son independientes y tienden a defender con energía su territorio. Un noruego vive feliz siendo el único gato de la casa.
Nombres alternativos:Skogkatt / Skaukatt / Norsk Skogkatt / Norsk Skaukatt / Weegie
Razas de gatos: Gato Bosque de Noruega
▷ El mundo de las Mascotas: Perros, gatos, aves, reptiles, anfibios
Reconocido por la LOOF, CFA, ACF, ACFA, TICA, FIFé, WCF
Origen: Rusia
Antiguedad: Década de 1980
Carácter: Sensato e ingenioso
Peso: 4,5 a 9 Kg
Como otras razas de gatos grandes y peludos, es el resultado del duro clima de su tierra, que favoreció a los cazadores más resistentes con un pelaje que los protegía del frío. No se reconoció como raza hasta la década de 1980, pero entonces se extendió rápidamente mediante su exportación a Europa y Norteamérica en la década de 1990, primero con el nombre de Gato Bosque de Siberia. Ahora se acepta en la mayoría de los registros, pero se ha modificado su nombre para evitar confusiones con el gato del bosque noruego. La versión punteada, llamada neva masquerait, no se reconoce en todas paises.
El Gato brasileño de pelo corto sigue siendo muy desconocido hoy en día, incluso en su país de origen. En ninguna parte ha adquirido mucha notoriedad, lo que se explica más fácilmente por el hecho de que la raza es todavía nueva y está en pleno desarrollo.
Contenido
Historia
Como su nombre indica, el Gato brasileño de pelo corto es originario de Brasil..
La historia de esta raza es relativamente reciente, ya que se supone que sus ancestros son los gatos traídos a Sudamérica -y en particular a Brasil- por los colonizadores portugueses a principios del siglo XVI. De hecho, llevaban gatos domésticos en sus barcos para cazar plagas como ratas y ratones. Con el tiempo, algunos de ellos acabaron reproduciéndose con la población local de gatos ya presente en Brasil.
Estos felinos llegaron en barco y fueron domesticados. Pero una vez en Brasil, se fueron convirtiendo en gatos asilvestrados. De hecho, como fueron abandonados en el lugar para algunos, y escapados para otros, volvieron a la naturaleza. Esta situación se prolongó durante siglos, más concretamente hasta la década de 1980.
El reconocimiento del Gato brasileño de pelo corto
Paulo Samuel Ruschi – criador, presidente de la Confederacao de Felinos Do Brasil (CFB) afiliada a la World Cat Federation (WCF) y del primer club de gatos de Río de Janeiro – emigró a los Estados Unidos, y fue el primero en realizar un estudio comparando la genética y los diferentes aspectos morfológicos de los gatos comúnmente observados en las principales ciudades de Brasil con los de otras grandes ciudades del mundo. El resultado fue muy claro, ya que comprobó que la población de gatos brasileños era bastante homogénea en cuanto a su aspecto, y que difería significativamente de los gatos callejeros de otras grandes ciudades del mundo.
A partir de estos datos generales, Paulo Samuel Ruschi decidió poner en marcha, ya en 1985, un programa de estudio más amplio destinado a recoger información sobre los gatos callejeros brasileños con el fin de desarrollar una raza nacional. Se organizó con otros tres criadores para observar el mayor número posible de gatos en tres ciudades diferentes: Río de Janeiro, Porto Alegre y Caera.
Los cuatro recorrieron las calles de estas tres ciudades y anotaron las características morfológicas -forma del cuerpo, cabeza, patas, hocico, nariz, ojos, cola y pelaje- de todos los gatos posibles. Comprobaron que, a pesar de la distancia entre las ciudades, su aspecto era muy similar.
Basándose en estas similitudes, elaboraron un estándar para lo que llamaron el brasileño de pelo corto: tamaño medio, cuerpo fuerte y musculoso, cabeza característicamente pequeña y más larga que ancha, ojos grandes, redondos y expresivos, y un pelaje corto y apretado. A continuación, seleccionaron no menos de 40 gatos de las tres ciudades para iniciar un programa de cría.
El Brasileño de pelo corto fue reconocido como raza por derecho propio por la BFC en 1994. Ese mismo año, se presentó una solicitud de reconocimiento a la Federación Felina Mundial (WCF). La presidenta de la WCF, Annelise Ackmann, viajó a Brasil para observar a los gatos y conocer a los miembros de la WCF que fundaron la raza. Poco después de su regreso a Alemania, donde se encuentra la sede de la WCF, el estándar del Brasileño de pelo corto propuesto por la WCF fue examinado en detalle por la organización. La WCF decidió aceptar los gatos como Gato céltico pelo corto, una raza también conocida como Gato europeo de pelo corto. Llegó a la conclusión de que tenían muchas similitudes con los gatos europeos de los que descendían.
Paolo Samuel Ruschi impugnó esta decisión y señaló las diferencias entre ambas razas. En efecto, en el Gato europeo de pelo corto, el cuerpo debe ser de mediano a grande y bien musculado, la cabeza grande, y no se aceptan todos los colores de pelaje. En cambio, el Gato brasileño de pelo corto tiene un cuerpo de tamaño medio, una cabeza más larga que ancha y se aceptan todos los colores de pelaje.
El hecho de que él mismo fuera un juez superior en la WCF ayudó a Paulo Samuel Ruschi a defender su posición ante la comisión, apoyándose en muchos documentos y fotografías. Incluso trajo a representantes de las razas para apoyar sus argumentos con ejemplos. Siguió presionando para que se reconociera un estándar para el pelo corto brasileño y, por tanto, el reconocimiento de la raza como tal. Sus esfuerzos acabaron dando sus frutos, ya que la institución lo hizo en 1998.
Sin embargo, fue el único. De hecho, los demás organismos oficiales a los que se acudió, como la American Cat Fanciers’ Association (CFA), el British Governing Council of the Cat Fancy (GCCF), la International Cat Association (TICA) o la Fédération Internationale Féline (FIFé) se negaron a reconocer la raza. Todos utilizaron más o menos el mismo argumento: como estos ejemplares son el resultado de la reproducción de gatos callejeros, no pueden corresponder de ninguna manera a los criterios necesarios para hablar de una raza felina propiamente dicha.
En la actualidad, los criadores siguen trabajando, buscando siempre mejorar las características de la raza. En su país de origen, el CFB emite un registro provisional para los gatos que se le presentan cuyas características se aproximan al estándar, y un registro definitivo para los que lo cumplen plenamente.
Popularidad del "Gato brasileño de pelo corto"
El Gato brasileño de pelo corto sigue siendo muy desconocido hoy en día, incluso en su país de origen. En ninguna parte ha adquirido mucha notoriedad, lo que se explica más fácilmente por el hecho de que la raza es todavía nueva y está en pleno desarrollo. La oposición de los principales organismos oficiales mundiales (la Federación Internacional del Gato, la Asociación Internacional del Gato, la Asociación de Aficionados al Gato en Estados Unidos, el Consejo de Gobierno de la Cat Fancy en Gran Bretaña…), con la notable excepción de la Federación Mundial del Gato (WCF), obviamente no ayuda a mejorar la situación.
De hecho, el número de criadores del Gato brasileño de pelo corto sigue siendo muy bajo, y esto es así en todo el mundo: sólo hay una decena de ellos, la mitad en Brasil. No hay, por ejemplo, ninguna en Europa, y sólo un puñado en Estados Unidos. Sin embargo, la gran población de estos pequeños felinos en las calles de Brasil representa un enorme caldo de cultivo para su desarrollo. De hecho, en Brasil, incluso los particulares pueden presentar su gato a la Confederación de Felinos Do Brasil (CFB) para su registro, en cuanto cumpla los criterios del estándar de la raza.
Características físicas
El Gato brasileño de pelo corto es un gato de tamaño medio con una complexión semi-cobby. Su cuerpo robusto y musculoso tiene un pecho ancho y redondo y termina en una cola que se estrecha hacia su punta redondeada. Se levanta sobre patas fuertes y de tamaño medio, que terminan en pies redondos.
La cabeza es relativamente pequeña y más larga que ancha. La cabeza está dominada por unas orejas de tamaño medio, redondeadas en la punta y con mechones de pelo en la base. Los ojos son grandes, redondos y expresivos, están bastante separados y coinciden con el color del pelaje. La nariz es de la misma anchura en toda su longitud. La mandíbula inferior y el mentón son fuertes y ligeramente prominentes. Por último, el hueso nasal ligeramente curvado a la altura de los ojos le da un perfil bastante particular.
El Gato brasileño de pelo corto no tiene subpelo, pero tiene un pelo denso y sedoso. La norma acepta todos los colores de pelaje.
Por último, esta raza no presenta ningún dimorfismo sexual particular: los machos y las hembras tienen un tamaño idéntico.
Carácter y aptitudes
El Gato brasileño de pelo corto es un gato muy mimoso y cariñoso, que no tolera la soledad y requiere mucha atención y ternura. Para mantenerlos contentos, sus dueños deben tener tiempo para pasar con ellos y no dejarlos solos durante muchas horas del día.
Disfrutan interactuando con todos los miembros de su familia y les gustan especialmente los niños, para los que son excelentes compañeros de juego; lo mismo ocurre a la inversa.
Al ser sociable por naturaleza, es perfectamente concebible que comparta su hogar con otro animal. Generalmente disfrutan de la compañía de otros gatos, especialmente si son tan activos como ellos. También es perfectamente concebible que tu gato conviva con un perro, sobre todo si conviven desde pequeños. En cambio, se requiere la máxima precaución con las aves o los pequeños roedores. Es mejor mantenerlos en un lugar seguro, como una jaula, ya que el instinto de caza de un gato puede despertarse en cualquier momento.
El Gato brasileño de pelo corto no sólo es enérgico, sino también muy ágil y curioso. Sin embargo, pueden vivir tanto en una casa con jardín como en un piso, siempre que éste sea lo suficientemente espacioso y tengan la posibilidad de hacer ejercicio. Si no tiene acceso al exterior o no hay árboles, es esencial proporcionarle un árbol para gatos adecuado, para que pueda ejercitar su agilidad y tener una percha en la que esconderse. A diferencia de muchos de sus compañeros, también es muy adaptable. Por ejemplo, mudarse con su gato es mucho menos problemático para un Gato brasileño de pelo corto que para muchas otras razas, ya que se apropian rápidamente de su nuevo entorno.
Su curiosidad y su capacidad de adaptación le confieren también un carácter desbocado. Este pequeño gato es un buen cazador, siempre deseoso de descubrir un nuevo entorno, y le gusta vigilar su territorio, que puede ser muy extenso. Por ello, no es de extrañar que a veces desaparezcan durante varios días.
Aseo
El Gato brasileño de pelo corto no requiere mucho mantenimiento, ya que tiene un pelaje corto y no tiene subpelo. El cepillado una vez a la semana es suficiente para eliminar el pelo muerto.
Al mismo tiempo, puedes limpiar las esquinas de sus ojos con un paño húmedo para asegurarte de que se mantienen limpios, y así reducir el riesgo de enfermedades oculares en los gatos.
También hay que comprobar si los oídos están infectados y limpiarlos con un paño húmedo.
La sesión semanal de mantenimiento es también una oportunidad para cepillar los dientes y comprobar que no hay problemas en esta zona (caries, depósitos de sarro, etc.). Además del riesgo de mal aliento para el gato, la falta de cuidados dentales puede provocar diversas enfermedades, algunas de ellas muy graves (por ejemplo, septicemia).
Por último, el desgaste natural suele ser suficiente para limar las uñas de un pelo corto brasileño que es capaz de correr por el exterior y arañar los árboles. No obstante, es aconsejable comprobar cada mes si es así y, en caso contrario, recortarlas manualmente. Lo mismo debe hacerse con un individuo confinado en el interior, que debe tener un poste de rascado a su disposición para evitar que sus garras crezcan demasiado rápido o que las haga en los muebles.
Tanto si se trata del cuidado de las orejas, los ojos, los dientes o las uñas de tu gato, no dudes en pedir ayuda a un veterinario o a un peluquero la primera vez, para asegurarte de que sabes cómo hacerlo correctamente. Además, es mejor acostumbrar a tu mascota a estas manipulaciones desde pequeña, para que todo vaya bien después.
Salud
El Gato brasileño de pelo corto parece tener una salud bastante robusta. Sin embargo, como esta raza es todavía nueva y está en proceso de desarrollo, no hay tiempo suficiente para identificar con precisión ciertas enfermedades a las que puede estar predispuesta.
Una cosa sigue siendo cierta: como en el caso de cualquier raza, los cuidados veterinarios regulares son la mejor manera de mantener a su gato en buen estado de salud. Esto incluye la inevitable revisión sanitaria en el veterinario: debe realizarse al menos una vez al año, permite detectar a tiempo cualquier enfermedad y garantiza que el gato esté al día con sus vacunas.
Alimentación
El Gato brasileño de pelo corto no es un animal exigente, pero es necesario proporcionarle una alimentación de calidad suficiente para satisfacer sus necesidades nutricionales. Tanto los productos elegidos como la cantidad que se le da cada día deben adaptarse a su edad y nivel de actividad.
Como su actividad física es en general bastante elevada, no es especialmente propenso a la obesidad. Sin embargo, si viven en un piso, suelen ser menos activos, por lo que es más probable que surja el problema. Esto es aún más cierto si ha sido castrado, ya que los gatos castrados ganan peso más fácilmente. Por lo tanto, para mantener a su gato sano, debe asegurarse de pesarlo aproximadamente una vez al mes. Si su gato tiene un sobrepeso persistente, o incluso si empeora después de varias mediciones consecutivas, debe tomar las riendas o arriesgarse a atraparlo en un círculo vicioso: cuanto más gordo esté, menos querrá moverse. Entonces es necesario acudir al veterinario para determinar el origen del problema (enfermedad, efectos secundarios de un medicamento, elección de un alimento inadecuado, ración diaria demasiado grande, etc.) y ponerle remedio.
Por último, como cualquier gato, el Gato brasileño de pelo corto debe tener agua disponible en todo momento.
Comprar un "Gato brasileño de pelo corto"
El Gato brasileño de pelo corto es una de las razas de gatos más raras. Por lo tanto, es difícil obtener uno, ya que no hay criadores en Europa.
La situación no es mucho mejor en Estados Unidos, donde hay muy pocos criaderos de Gato brasileño de pelo corto. Generalmente ofrecen sus gatitos por unos 1000 dólares.
Incluso si se dirige a su país de origen, Brasil, es difícil encontrar uno, de nuevo debido al reducido número de criaderos. El precio de un gatito de Gato brasileño de pelo corto suele rondar los 1500 reales brasileños (algo más de 200 euros).
En el caso de una adopción en el extranjero, los costes de transporte y los gastos administrativos se añaden al precio de compra y, por supuesto, es necesario respetar la legislación relativa a la importación de animales.
Valoraciones del "Gato brasileño de pelo corto"
Es importante la convivencia que vas a tener con tu nuevo amigo. Antes de plantearte la adquisición de un gato de la raza "Gato brasileño de pelo corto" debes conocer ciertos factores. Debes tener en cuenta su carácter, su necesidad de ejercicio, su interacción con otras mascotas, sus cuidados y si tienes niños pequeños, su nivel de tolerancia hacia ellos.
Reconocido por la LOOF, ACF, FIFé, GCCF, WCF. TICA, CFA
Origen: Reino Unido
Antiguedad: 1981
Carácter: Afectuoso y juguetón
Peso: 3,6 a 4,5 Kg
El Gato Burmilla nace a raíz de una cruza accidental, ocurrida en el Reino Unido entre un gato Persa chinchilla y una Burmesa lila, y fruto de este amorío gatuno, en 1981 nacen sus cuatro gatitos. En el año 1984 se importaron varios gatos de esta raza a Dinamarca.
Al Burmilla se le considera parte de la raza del grupo asiático.
Su color es blanco pero como si tuviera una manta de sombras y tonos negros. Aunque se presentan distintos patrones, de colores blanco o plata con negro, azul, chocolate, lila, rojo, crema y tortuga. Las distintas marcas y colores dan más de 40 capas distintas.
Sus ojos tienen forma oblicua de tamaño grande, la línea inferior es muy curvada, siempre en tonos diversos de verde.
Son de tamaño mediano con cuerpos musculosos, caras redondas y hocico corto
El Burmilla es un gato muy irreverente e independiente que adora a su dueño y muestra muchas características similares a las de un gatito, incluso en la edad adulta. En el temperamento que son sociables, juguetones y cariñosos, y se llevan bien con los niños y otros animales.
Razas de gatos: Burmilla
▷ El mundo de las Mascotas: Perros, gatos, aves, reptiles, anfibios
Valoraciones del "Gato Sagrado de Birmania (Birmano)"
Es importante la convivencia que vas a tener con tu nuevo amigo. Antes de plantearte la adquisición de un gato de la raza "Gato Sagrado de Birmania (Birmano)" debes conocer ciertos factores. Debes tener en cuenta su carácter, su necesidad de ejercicio, su interacción con otras mascotas, sus cuidados y si tienes niños pequeños, su nivel de tolerancia hacia ellos.
Alegría
3,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Nivel de actividad
2,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Amabilidad con otras mascotas
4,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Amabilidad con los niños
4,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Requisitos de aseo
4,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Vocalidad
1,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Necesidad de atención
4,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Afecto hacia sus dueños
4,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Docilidad
5,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Inteligencia
3,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Independencia
2,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Robustez
3,0 de 5 estrellas (basado en 1 reseña)
Historia
El Gato Sagrado de Birmania (Birmano) ha aparecido recientemente en Europa y su origen sigue siendo misterioso. Se dice que algunos ingleses trajeron de Birmania un par de gatos del llamado templo de Lao-Tsun.
Se dice que una tal Sra. Leotardi, en el sur de Francia, era la propietaria de Poupée de Madalpour, una gata birmana Seal point, expuesta en París en 1926, cuyos padres procedían de Birmania y le fueron regalados por una tal Sra. Thadde-Haddish.
De hecho, los primeros sujetos serían el resultado del cruce de un Gato siamés marcado de blanco al final de las patas con un gato de pelo largo (angora o persa) practicado en los años veinte, en la región de Niza.
Alrededor de 1930, el Dios de Arakan, un macho Seal point, se convirtió en la estrella de los espectáculos felinos.
Después de la Segunda Guerra Mundial, durante la cual la raza estuvo a punto de desaparecer, se realizaron infusiones de sangre de un Gato persacolourpoint para limitar la endogamia.
En 1950, la raza fue rebautizada como Gato Sagrado de Birmania (Birmano) para evitar la confusión con el Gato Burmés.
Introducida en Estados Unidos en 1959-1960 y en Gran Bretaña en 1965, donde fue reconocida, esta raza es muy popular entre el público y tiene un gran éxito.
Características físicas
El Gato Sagrado de Birmania es un tipo largo y poderoso. Es relativamente corpulento, con una cabeza ancha y redonda con grandes orejas y ojos profundos, casi redondos, de color azul claro.
La cara no es aplanada y la nariz es más bien larga y recta. El cuerpo es alargado y las patas largas.
El pelaje es largo, sedoso, más tupido en el cuello. El vientre tiene el pelo ligeramente rizado.
Un rasgo característico de esta raza es la presencia de marcas blancas simétricas en las patas, llamadas «guantes».
Colores points: seal, azul, lila, rojo y crema. Concha de tortuga de todos los colores, excepto rojo y crema.
Tamaño y peso
Tamaño: 30 cm
Peso: De 4 a 6 kilos
Estándar de la raza
Los estándares de la raza son documentos elaborados por organismos oficiales que enumeran las condiciones que debe cumplir un birmano para ser plenamente reconocido como perteneciente a la raza:
A medio camino entre el persa y el siamés, este gato es tranquilo, equilibrado, ni pasivo ni exuberante.
Menos dócil que el persa, es sin embargo más tranquilo, silencioso y menos activo que el siamés.
Gentil, afectuoso (especialmente los machos), a menudo un poco posesivo, no soporta la indiferencia y menos la soledad, aunque parezca un poco individualista. Su voz es suave.
Es sociable con sus compañeros.
Juguetón, es un compañero agradable para los niños. Pero también le gusta la paz y la tranquilidad.
En el exterior, son robustos, atléticos y grandes cazadores.
Las hembras, adultas de unos 7 meses de edad, son madres muy preocupadas por sus crías.
Aseo
El mantenimiento del pelaje es relativamente más fácil que el del persa, ya que los nudos y los enredos son poco frecuentes.
En tiempos normales, el cepillado y el peinado semanales son suficientes para mantener el pelaje. Sin embargo, durante la muda, es necesario el cepillado y el peinado diarios.
Videos del "Gato Sagrado de Birmania (Birmano)"
Birman Cat Are Awesome - Cute Birman Cats Videos Compilation